Poner
en marcha un negocio es una tarea compleja, para la que no están
hechas todas las personas. "No existe un cerebro emprendedor",
sostiene Marta Romo, socia fundadora de Be-Up, aunque sí es
necesario desarrollar ciertas competencias, como "la capacidad
de adaptación y la resistencia a la frustración".
No hay comentarios:
Publicar un comentario